Del residuo al recurso: el ciclo completo de un hilo reciclado

A veces, la sostenibilidad empieza con una pregunta sencilla: ¿y si lo que llamamos residuo todavía tiene valor?

Donde algunos ven restos, nosotros vemos materia viva.

Cada fibra, cada color, cada hebra puede volver a formar parte del ciclo textil.

Esta es la historia de un hilo reciclado: un viaje que comienza entre desechos y termina en innovación.

Del residuo al recurso

Cada año, la industria textil genera millones de toneladas de residuos. Solo una pequeña parte se recicla. En Hilaturas Jesús Rubio decidimos transformar esa realidad convirtiendo materiales descartados en recursos valiosos.

Nuestros hilos reciclados pueden proceder de restos industriales, prendas usadas o materiales plásticos como botellas y redes de pesca. Cada tipo de residuo requiere un tratamiento diferente, pero todos comparten el mismo propósito: cerrar el ciclo y reducir el impacto ambiental.

Seleccionar la materia prima adecuada según la aplicación, ya sea moda, tapicería, automoción o textil técnico, es el primer paso para asegurar la calidad y el rendimiento.

Una segunda vida para la fibra

Reciclar no significa improvisar. Antes de hilar, cada material se clasifica por composición, color y estado. Así reducimos el uso de tintes, eliminamos impurezas y garantizamos una base homogénea.

Después, la fibra se abre, limpia y carda hasta recuperar su elasticidad natural.

El resultado es una mezcla lista para renacer como hilo, con la resistencia y suavidad necesarias para volver a integrarse en la cadena textil.

Donde ocurre la transformación

En la fase de hilatura, la fibra reciclada se convierte en un nuevo hilo mediante procesos mecánicos de alta precisión.

Combinamos diferentes sistemas, como open-end, anillos o mixtos, según el tipo de fibra y el uso final, buscando siempre el equilibrio entre rendimiento, textura y sostenibilidad.

Cada hilo se personaliza en color, torsión y grosor, y pasa pruebas de tracción, regularidad y fricción para garantizar que su comportamiento técnico sea tan fiable como el de cualquier fibra virgen.

Calidad y trazabilidad sin concesiones

Un hilo reciclado solo tiene sentido si mantiene su integridad técnica.

Por eso aplicamos un control exhaustivo en cada fase de producción y certificamos nuestros procesos bajo estándares internacionales.

Las certificaciones GRS (Global Recycled Standard) y OEKO-TEX® Standard 100 avalan tanto la procedencia del material como la ausencia de sustancias nocivas, garantizando una producción limpia, responsable y trazable.

De la bobina al tejido

Una vez en bobina, el hilo reciclado se convierte en materia prima para nuevas historias:

• en la moda, da vida a tejidos de punto o denim;
• en la decoración, a tapicerías resistentes;
• en la industria, a componentes técnicos o ignífugos;
• y en el campo o la sanidad, a soluciones de refuerzo o filtración.

Cada aplicación demuestra que reciclar no es renunciar al rendimiento, sino repensar cómo producir con inteligencia y propósito.

Innovar desde lo cercano

Fabricar en España es una decisión que une sostenibilidad, control y proximidad.

La producción local reduce emisiones, asegura la trazabilidad y mantiene la calidad de principio a fin.

Además, la innovación constante en nuevos materiales combinando fibras recicladas con naturales o técnicas nos permite crear hilos más versátiles, estables y duraderos, adaptados a las necesidades de cada sector.

Formar, inspirar, transformar

El reciclaje textil también se impulsa con conocimiento.

Por eso colaboramos con escuelas de diseño, talleres y universidades, compartiendo experiencia y fomentando la creatividad circular.

Creemos que cada nueva generación de diseñadores tiene el poder de imaginar tejidos que respeten el ciclo natural de los materiales.

Preguntar antes de elegir sobre el origen, las certificaciones o el comportamiento técnico es hoy más que nunca una forma de compromiso.

Cerrar el círculo

Cada hilo reciclado que sale de nuestras instalaciones representa una pequeña victoria: la de un modelo de producción más humano, eficiente y consciente.

Tecnología, sostenibilidad y oficio artesanal se entrelazan en un mismo gesto: el de transformar residuos en recursos.

Del residuo al recurso. Del hilo al compromiso. Y en cada hebra, una nueva oportunidad para empezar de nuevo.