El reciclaje de lana
El reciclaje de lana es un proceso que impulsa la sostenibilidad en la industria textil y que logra hacer frente a ciertos retos visibles en el sector.
Muchas personas piensan que el uso de materiales reciclables en la ropa limita la calidad de las prendas, pero nada más alejado de la realidad.
La lana reciclada proviene de prendas confeccionadas con lana que ya cumplieron su vida útil. Así que como parte de un ciclo, estos elementos usados retornan al proceso productivo.
Después de un complejo proceso que te contaremos más adelante en este post, las fibras de lana vuelven a su estado original y esto es lo que permite que el material pueda ser usado para crear nuevas piezas.
De acuerdo con el portal Statista, al menos el 14% de la producción del sector textil se consolida usando lana reciclada. Y se han generado esfuerzos en los últimos años para incrementar dicha cifra.
Historia del reciclaje de lana
Quizás te sorprenda conocer que la producción de lana reciclada lleva varias décadas funcionando, y que ha ido evolucionando conforme surgían nuevas tecnologías.
La industria textil rápidamente comenzó a tener éxito, pero no pasó mucho tiempo para que las empresas notarán los altos costes de mantenimiento y de producción para introducir nuevas prendas en el mercado.
Las compañías se vieron en la necesidad de trazar estrategias para reducir costes de producción. Y a partir de esta necesidad surgió la iniciativa de usar materia prima reciclada, siendo el impulso base en el proceso de reciclaje de lana.
En el año 1813, un profesional de la industria llamado Benjamin Law decidió utilizar material textil de lana usado y lana virgen, dando paso a la creación de un material conocido como Shoody y Mungo. Esta revolución sostenible tuvo lugar en Batley, Yorkshire.
Las industrias de Shoddy y Mungo se posicionaron como pioneras en la iniciativa del reciclaje de material textil, permitiendo restaurar fibras de lana de calidad.
Pero con los años empresas de otras partes de Europa, como Italia, dieron paso a sus propios procesos de restauración de material reciclado. Lo que permitió iniciar una verdadera revolución hacia la sostenibilidad.
La historia del reciclaje textil es totalmente fascinante, y aunque inicialmente la motivación principal era incrementar el margen de ganancias, hoy en día ofrece ventajas ecológicas muy significativas.
Proceso de Reciclaje de Lana en la Actualidad
¿Qué es y cómo se obtiene este material sustentable? El reciclaje de lana involucra un proceso arduo que inicia con el almacenamiento de restos textiles que ya no serán usados como prendas porque han agotado su vida útil.
Las prendas para reciclaje primero son clasificadas según el color, luego a la ropa se le remueven elementos que no son de lana, como los cierres, etiquetas o forros. Gracias a esto solo se mantiene el contenido textil, cuidando la calidad del material.
El siguiente paso consiste en carbonizar los materiales seleccionados, este proceso permite eliminar la celulosa para no afectar la excelencia de la lana reciclada. Después de revisar a mano la tela sobrante, se coloca en una máquina que lava y tritura.
Una vez que se obtiene la lana triturada y completamente seca, se inicia el conteo de hilos. De esta forma, lo que inicialmente era una prenda vieja se convierte en fibra de lana muy resistente y lista para transformarse en una nueva tela.
Si bien es cierto que la tecnología ha evolucionado, introduciendo en el sector auténticas maravillas para optimizar el proceso, algunos aspectos siguen siendo manejados a mano. Por ejemplo, la división de materiales por tipo, color y por la calidad de la fibra.
De hecho, uno de los principales atributos del reciclaje de lana es que no se realizan procesos de teñido. En cambio, la selección de las prendas para reciclaje por color, permite el desarrollo de fibras de tonalidades precisas.
Impacto Económico y Ecológico
¿Pueden estas prácticas ecológicas en textiles disminuir los costes de producción? ¡Totalmente! De esta manera las empresas logran cuidar sus activos y fomentar la conciencia social a nivel ecológico.
Disminuir el impacto ambiental de la lana actualmente sigue siendo una iniciativa avanzada. Y este proceso que permite obtener hilos regenerados sin descuidar los criterios de calidad, aporta mucho al medioambiente.
El reciclaje de lana no involucra el proceso de teñir el material, esto ayuda en el ahorro del agua. Pero esto no es todo, sino que se reduce el uso de químicos que dejan residuos tóxicos en el ambiente.
Por otro lado, la obtención de lana reciclada es más respetuosa y atenta con el bienestar animal. No es necesario destinar cientos de kilómetros de tierra para criar ovejas productoras de lana, sino que el material es reutilizado.
Y principalmente, mediante el aprovechamiento de las prendas de lana que ya no serán usadas, se reduce el porcentaje de desperdicio textil en los vertederos de basura. Pues este proceso demuestra que son elementos útiles dentro de la industria.
La Lana en el Contexto del Reciclaje Global de Fibras
La moda sostenible en la actualidad es un tema muy importante, pero todavía queda un largo camino para elevar las estadísticas en torno a la producción de materiales textiles a partir del reciclaje.
Es así como la lucha entre la lana versus fibras sintéticas sigue su curso. Aunque ha habido una mayor concientización a nivel medioambiental. Pues el material sintético involucra procesos altamente contaminantes.
Sin embargo, la producción de moda sostenible tiene ciertos retos, como el alto consumo de energía de algunos procesos. Por ejemplo, la transformación de botellas PET a material textil como poliéster, requiere del uso de máquinas de alto consumo eléctrico.
Por esto se apunta al aprovechamiento de material natural. SISA es una de las marcas más imponentes en cuanto al desarrollo de lana y a su posicionamiento en el reciclaje global de fibras. Sus prendas vienen con una certificación "Estándar Global de Reciclaje".
Esto acredita que el proceso de producción realmente logra la reducción del impacto medioambiental. La compañía ha hecho frente a desafíos mediante el uso de la tecnología, incluso disponen de plantas fotovoltáicas para aprovechar la energía renovable.
En conclusión, ¿Por qué aprovechar la lana ecológica?
Aunque es emocionante apreciar que el proceso de reciclaje de lana está teniendo más aceptación, y que incluso dentro de los intereses del consumidor está la concientización ecológica, todavía queda mucho por hacer.
El reciclaje en la industria textil sigue siendo dominado por la transformación de materiales como el plástico. Sin embargo, tanto la lana reciclada como otros materiales textiles están teniendo más participación en la moda sustentable.
El nylon reciclado aumentó a 12,01% vs el 4,5% de producción que percibió en el 2022. Mientras que la lana reciclada en países como Europa continúa siendo ampliamente demandada.
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